Padre Olivera Ravasi
25/08/2024
Ilmo. Sr
Don Luis María Mesquita
Me dirijo a Vd, con motivo de la sanción aplicada al Padre Olivera Ravasi rogándole la publicación en “Nobleza y Élites Tradicionales”, que dignamente dirige.
Es de todos sabido que la exclusión del prestigioso sacerdote se originó a raíz de una visita que hiciera a unos presos, detenidos en una unidad penitenciaria.
Con el debido respeto hacia la autoridad eclesiástica, debo manifestar mi absoluto desacuerdo con la misma.
En efecto, visitar a quienes están privados de su libertad es una obra de misericordia; y es obvio que la actividad punitiva, presupone un obrar culpable. El ejercicio de la misericordia, rectamente practicada, constituye un mérito sobrenatural, que no puede merecer reproche alguno.
El Doctor Angélico, al tratar de la “vindicta” o actividad punitiva, dice que: “La ley del evangelio es ley de amor, por lo que no se debe castigar a quienes obran bien por amor que son quienes verdaderamente pertenecen al evangelio…”(IIa-IIae, q 108, 1 ad3).
A mi criterio, la autoridad eclesiástica ha incurrido en un grosero error, que sorprende por su magnitud. Entretanto, llama la atención la actitud irreprochable del sacerdote sancionado, quien recibió la comunicación de la expulsión con paciencia y resignación, como lo manda la moral cristiana, según pude apreciarlo en los medios televisivos.
Quiero convocar a mis hermanos en la fe a manifestar su solidaridad con quien fuera injustamente castigado y, de consiguinte, pedir a la autoridad competente la revocación del acto criticado en el presente escrito.
Sin más, me despido de Vd, con profunda caridad en Nuestro Señor Jesucristo y su Santísima Madre.
Carlos Alfredo Benítez Meabe
DNI 8607521